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Muchas son las inquietudes que genera en Cuba el destino y la atención de los ancianos. Precisamente en Cuba, el país más envejecido de América Latina.

Los familiares de ancianos en Cuba viven hoy en permanente zozobra, con un temor constante: ¿cómo poder enfrentar una enfermedad, accidente y/o postración de una persona de la tercera edad en casa? Hasta que llega el día en que pasa, y la pesadilla de las interrogantes, se hace realidad para la familia.

Foto: Cubanet

Así le sucedió a la cubana Julia Quian Vega, quien ha planteado en las redes sociales su caso, que es el caso de miles de cubanas y cubanos. Estas son sus dos problemáticas resumidas: 

Mi madre fue operada de una cadera partida.

¿Por qué se le ponen láminas a los ancianos que se operan de la cadera, cuya recuperación lleva 3 meses encamado, propiciando una serie de trastornos para toda la familia trabajadora y estudiante, en ocasiones no tienen familia y sufren de complicaciones que le causan la muerte? Si se le pone una prótesis, el paciente se recupera en una semana, puede caminar y valerse por sí mismo, disminuye el riesgo de otras enfermedades oportunistas como neumonía, trastornos circulatorios y ortopédicos, renales, del sistema digestivo y las conocidas escaras.

Para la familia que trabaja estos cuidados por más de 3 meses generan desvinculaciones laborales, ausencias, llegadas tardes y salidas antes de la hora establecida, en resumen, inestabilidad laboral, acompañada del estrés que sufre el cuidador y el centro laboral del mismo, generando afectaciones sociales. 

Mi madre fue operada en el Fructuoso Rodríguez, tenemos que pagar a las ambulancias para poder garantizar el traslado hacia el hospital el día de consulta que dicho sea de paso, aún no hemos logrado que el médico que la operó, le dé el seguimiento reglamentado ya que no ha asistido a la consulta planificada.

El hospital antes mencionado, se encuentra en reparación en la parte de consultas, por lo que los pacientes que deben asistir a estas, deben acudir al policlínico universitario19 de abril. Las consultas en horario y lugar, fueron cambiadas para ese policlínico sin previo aviso a los pacientes a pesar de tener escrito en la historia clínica el teléfono y dirección, esto origino que desde las 9;00 am y hasta las 3;00 pm el paciente estuvo sentado en silla de ruedas sin poder siquiera orinar, sin almorzar etc. Finalmente el médico nunca se presentó a consulta.

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Este es y ha sido el caso de muchos cubanos que tienen ancianos en casa que han debido ser sometidos a cirugías de cadera y su posterior tratamiento. Sufre tanto el anciano, como el familiar que lo debe atender y debe responsabilizarse por su atención médica. Y ¿qué sucede entonces con los ancianos que ni siquiera tienen familia?

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